El 72% de las mujeres víctimas de acoso en el trabajo no lo ha denunciado
El 72% de las mujeres que han sufrido acoso sexual o por razón de género en su trabajo no ha denunciado los hechos a su empresa y la mayoría de ellas argumentan miedo a represalias, a ser señaladas por sus compañeros o vergüenza.
Una encuesta, realizada a 1.119 mujeres trabajadoras de entre 16 y 64 años que han sido víctimas de acoso sexual o de acoso por razón de sexo, ha puesto de manifiesto que cualquier mujer puede sufrir este tipo de discriminación, aunque la mayoría de los casos se concentran entre los 25 y 44 años.
En cuanto al perfil del acosador, se trata mayoritariamente de varones que pueden ser tanto superiores jerárquicos como compañeros o clientes y pueden pertenecer a cualquier estrato social, nivel ocupacional, edad o categoría profesional.
La mayoría de víctimas no comunican el acoso
La delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, ha recordado que según los datos de la Macroencuesta de Violencia Contra la Mujer 2019 prácticamente una de cada cinco mujeres es acosadas sexualmente o lo han sido en el ámbito laboral.
Pero, a pesar de estas cifras, el 72% de las víctimas no ha puesto el caso en conocimiento de su empresa y, de ellas, el 61,9% no lo ha hecho por temor a represalias.
El 51,6% de las víctimas desconocían si otras mujeres de su trabajo habían sufrido acoso sexual o por razón de sexo, lo que refleja la «invisibilidad» de estas situaciones y experiencias.
Además, la realidad demuestra que es muy difícil aportar pruebas de una conducta que frecuentemente sucede sin testigos, y ello desanima a muchas víctimas a emprender las acciones legales oportunas, ha lamentado.
Entre las encuestadas, el 80,4% se ha sentido discriminadas en el trabajo y las principales causas de esa discriminación son: dirigirse a la mujer de forma ofensiva (61,1%), asignación de tareas, competencias o responsabilidades por debajo de su categoría profesional (32,4%), ser relegada en la promoción profesional (25,7%), problemas para acceder o continuar en el trabajo (22,2%), y ser relegada en la formación (15,4%).
Entre las encuestadas, el 80,4% se ha sentido discriminadas de alguna forma en el trabajo.
En cuanto a las conductas constitutivas de acoso sexual, los porcentajes más elevados corresponden a chistes de carácter sexista (83,1%), piropos y comentarios sexuales (74,8%), gestos o miradas insinuantes (73,3%), contacto físico (67%) y peticiones e invitaciones de naturaleza sexual (30,9%).
Las mujeres indican que estas acciones han sido realizadas principalmente por superiores jerárquicos (47,4%), por personas de la misma categoría laboral (32,4 %) y por otras personas entre las que se señalan familiares y amistades del jefe (1,8 %) y clientes (1,5 %).
Los efectos del acoso laboral
Blasco ha advertido de que el acoso sexual y el acoso por razón de sexo tienen efectos importantes sobre la salud de la víctima que, en muchas ocasiones, se han visto obligadas a cambiar de ciudad, de entorno social o de sector laboral para poder seguir adelante.
Entre los efectos sobre la salud más comunes se encuentran alteraciones psicológicas como la ansiedad, depresión, estados de nerviosismo, o trastornos del sueño, dolores de cabeza y problemas gastrointestinales.
Todas estas consecuencias pueden acabar repercutiendo en el deterioro de la calidad de vida de la persona acosada, tanto en el ámbito laboral como en su vida privada y, sin embargo, de las mujeres encuestadas el 87,8% no solicitó ningún tipo de baja a pesar de que la permanencia en el trabajo podía tener efectos negativos sobre su salud.
FUENTE: PUBLICO.ES
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!